Obra del tallista y escultor Luis Salmerón Verdú, de Socuéllamos (Ciudad Real) que la hizo en el año 2000. El paso se compone de las imágenes de Jesús Nazareno con la Cruz a cuestas, acompañado de la Verónica y ayudado por Simón de Cirene. El conjunto se adquirió para sustituir al Jesús Nazareno titular de la hermandad, pues las imágenes que le acompañaban de la Verónica y el Cirineo, se encontraban en estado de deterioro, lo que forzó su renovación.
Las esculturas son de tamaño natural (1,70 mts, aproximadamente) realizadas al completo en talla en madera de tilo. La escena es armoniosa por la relación entre las imágenes, que parece que están en un diálogo callado. El Nazareno flexiona las rodillas como si estuviera a punto de sufrir una de sus caídas. El rostro delgado y los ángulos de piernas y brazos, marcados bajo la túnica, crean líneas quebradas que aportan movimiento. El Cirineo soporta encorvado el peso de la cruz por la parte trasera.
La imagen más curiosa del paso es la Verónica que se encara a Jesús con las manos juntas, como si estuviera rezando, pero de ellas sale el paño con la faz del Redentor, que queda abierto entre sus brazos como por la acción del viento. Participa en la procesión del Jueves Santo en la que, junto con la Virgen de la Soledad, escenifica la ceremonia del Encuentro. Es cargado a hombros por 40 banceros.